No te conozco; Pero p uedo decir que cuando estás triste caminas con las manos escondidas O que le quitas importancia a todo lo que te parte el alma para poder guardar a salvo un poquito de mis restos. Sé lo que arrastran tus corrientes cuando no susurran. Que entre latido y latido se esconden los otoños mas desnudos que hayamos sobrevivido. Puedo decir cada inclinación anímica de tu boca sin titubear, cada vocal pronunciada para no decir verdades con v. Sé como suena tu desesperación, como lloran tus libros y como sana tu disfraz. Sé mucho y conozco poco; Pero sé a que sabes cuando no sabes conocerte y me conozco siempre y cuando me mire a los escombros.