Te acercas a mi,
con las manos llenas
de ganas y caricias
para besarme cualquier
pedazo de piel al descubierto
y
hacerme sentir libre como
cuando riego las plantas
descalza y despeinada,
con los pies encharcados
en una tarde de mayo.
Entonces Sevilla
vuelve a tener encanto
y los naranjos florecen
para llenar nuestras bocas
de azahares y azoteas.
Amor, el verano entró
con tu llegada una noche
de enero.
con las manos llenas
de ganas y caricias
para besarme cualquier
pedazo de piel al descubierto
y
hacerme sentir libre como
cuando riego las plantas
descalza y despeinada,
con los pies encharcados
en una tarde de mayo.
Entonces Sevilla
vuelve a tener encanto
y los naranjos florecen
para llenar nuestras bocas
de azahares y azoteas.
Amor, el verano entró
con tu llegada una noche
de enero.
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